En agosto ya pronostiqué que iba a ser un buen año de setas y no me equivocaba, ayer mismo hice una pequeña escapada y el brote de Boletus Edulis ha sido increíble.
Hace tiempo que quería hablar del que es el rey del bosque, y esta vez no me refiero a los ciervos, me refiero a la seta más generosa y apetitosa que crece en los bosques. El Boletus Edulis es una bendición, su aspecto y sabor la convierten en un manjar. Como ha sucedido este año, con lluvias desde finales de agosto, que continuaron parte de septiembre, y luego hizo sol, se dió la perfecta combinación climática para la aparición de esta especie, pues le gusta el calor. La podemos ver desde finales de verano hasta casi el invierno, dura bastante, pero su número se reduce considerablemente según viene el frío.
De aspecto globoso en su nacimiento, con un color crema en el sombrero crece hasta los 25cm o más transformándose progresivamente en color chocolate o marrón pálido, según le de el sol. La esponja que un principio es blanca y compacta, se transforma, ya en la madurez, en una esponja amarilla que se tiñe de verde al roce o la presión. Cuando sigue blanca es perfectamente comestible, pero cuando amarillea es aconsejable quitarla, se quita muy fácilmente.
El tallo varía mucho según sea el terreno, se adapta a la hojarasca, piedras y demás, con lo que podemos verle barrigudo, ancho y espléndido, o largo y curvado, dependerá de la dificultad que encuentre al salir. Siempre tendrá un color crema marrón muy agradable y es comestible, muy bueno.
Suele salir por individuos solitarios, aunque no es extraño ver un corro de ellos. Tiene predilección por los bosques de coníferas, aunque también puede salir en caducifolios, pero en menor número.
El Boletus Edulis requiere de altura, lo encontraremos en bosques que estén como mínimo a 1000 metros.
La carne es blanca con manchas rojizas, aspecto mantecoso, muy firme cuando son jóvenes. Es un bocado exquisito, muy sabroso. Aconsejo hacerlo a la plancha, o hacer un delicioso risotto con ellos.
Es una de las setas que no tiene confusión, así que suerte y a por él.
Hace tiempo que quería hablar del que es el rey del bosque, y esta vez no me refiero a los ciervos, me refiero a la seta más generosa y apetitosa que crece en los bosques. El Boletus Edulis es una bendición, su aspecto y sabor la convierten en un manjar. Como ha sucedido este año, con lluvias desde finales de agosto, que continuaron parte de septiembre, y luego hizo sol, se dió la perfecta combinación climática para la aparición de esta especie, pues le gusta el calor. La podemos ver desde finales de verano hasta casi el invierno, dura bastante, pero su número se reduce considerablemente según viene el frío.
El tallo varía mucho según sea el terreno, se adapta a la hojarasca, piedras y demás, con lo que podemos verle barrigudo, ancho y espléndido, o largo y curvado, dependerá de la dificultad que encuentre al salir. Siempre tendrá un color crema marrón muy agradable y es comestible, muy bueno.
Suele salir por individuos solitarios, aunque no es extraño ver un corro de ellos. Tiene predilección por los bosques de coníferas, aunque también puede salir en caducifolios, pero en menor número.
El Boletus Edulis requiere de altura, lo encontraremos en bosques que estén como mínimo a 1000 metros.
La carne es blanca con manchas rojizas, aspecto mantecoso, muy firme cuando son jóvenes. Es un bocado exquisito, muy sabroso. Aconsejo hacerlo a la plancha, o hacer un delicioso risotto con ellos.
Es una de las setas que no tiene confusión, así que suerte y a por él.
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